La robótica es la rama de la ingeniería que se especializa en todo el proceso creativo, constructivo y de aplicación de los robots. La tecnología forma parte de la rutina diaria de los niños: desde el juego en su tiempo libre hasta el aprendizaje en la escuela. Introducir en su matrícula escolar la programación  o el diseño de robots puede abrirles la mente y el camino hacia profesiones que serán clave en el futuro.

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La robótica implica desde el diseño de la estructura de un robot hasta el desarrollo del código para programar sus funciones. Es decir, crear desde cero una máquina, del tamaño que sea, dirigida a ejecutar la actividad para la que se le programa.

Beneficios de enseñar robótica a niños

Existen múltiples ventajas que aporta la enseñanza de robótica, entre estas podemos encontrar:

  • Ayuda a desarrollar el lenguaje
  • Desarrolla habilidades motoras finas
  • Fomenta la creatividad y el pensamiento crítico
  • Facilita el aprendizaje de las matemáticas y la resolución de problemas
  • Fomenta el trabajo en equipo y favorece la socialización
  • Mejora la memoria y la concentración, además de estimular la curiosidad

El aprendizaje de la robótica puede dividirse en las fases de diseño, construcción y programación y cada alumno tendrá aptitudes concretas para una o varias de estas etapas y la clave para lograr su interés e implicación estará también en detectar su perfil y potenciarlo. Los alumnos disfrutarán aprendiendo cómo pueden hacer que una máquina realice movimientos, al mismo tiempo que desarrollan sus competencias matemáticas, lógicas, entre muchas otras. Es importante tener en cuenta que la base de la robótica es, la programación.

Recursos para integrar la robótica en el salón de clases

Para enseñar robótica, se puede hacer uso tanto de herramientas digitales como de juegos y aplicaciones para aprender a programar, así como de robots educativos con los que los alumnos se divertirán en el salón de clases. Existen robots educativos de distintas formas y niveles; cada uno de estos sets para construir robots educativos están orientados a la comprensión y desarrollo de alguna de las áreas que integran la robótica. Algunos fomentarán más el desarrollo de la creatividad, mientras que desarrollarán las competencias de programación.

Aquí te dejamos algunos ejemplos de robots educativos:

  • Robot Sphero Mini, de Sphero Edu. Un robot con giroscopio y acelerómetro de tamaño reducido y luces LED que se iluminan mientras se mueve. Presenta un nuevo modo de conducción: facial. Además, es programable, con lo que también permite aprender programación.
  • Mindstorms, de Lego. Más allá de los juegos de bloques para todas las edades, la compañía danesa tiene una gama de robots educativos con los que poder practicar desde el ensamblaje de las piezas para dar forma a su robot hasta la programación de las órdenes que ejecutará.
  • Robot Zowi, de BQ. Indicado para niños a partir de los 8 años, este robot permite a los pequeños divertirse dándole forma con sus piezas, enseñándole a andar e incluso, bailar. Tiene una placa programable a través de una aplicación, que permite diseñar y programar nuevos comandos para que Zowi los siga.

Hay opciones para todos los niveles y edades, lo cual ayuda a que cada vez más escuelas los incluyan entre sus actividades extraescolares. La demanda de capacidades y competencias relacionadas con la tecnología en el mercado laboral está ampliando las posibilidades de las instituciones hacia asignaturas relacionadas con las TIC, que fomenten el aprendizaje participativo e impulsen el conocimiento de estos temas entre los alumnos.